Las contracciones Braxton Hicks se hacen presentes a partir del cuarto mes, aunque se pueden sentir antes, e incluso no sentir durante todo el embarazo. Eso dependerá de cada mujer, aunque por regla general terminan por aparecer y se hacen más notables a medida que avanza el embarazo.
Estas contracciones se detectan fácilmente, ya que de repente el útero se endurecerá provocando también que la barriga se ponga dura, lo que producirá cierta incomodidad en la mujer (aunque no dolor) y como consecuencia de ello no podrá casi doblarse hacia adelante. Esto no dura más que un par de minutos, y la embarazada podrá aliviar los síntomas descansando, cambiando de posición, o andando un poco por la casa, pero siempre manteniendo la calma y no dándole ninguna importancia, ya que es algo totalmente normal. Hay que recordar que su objetivo es ni más ni menos que preparar la musculatura del útero para el futuro parto.
Las contracciones Braxton Hicks se harán más presentes, además de más intensas, en el último mes de embarazo. Por ese motivo muchas futuras madres se alarman y las confunden con las contracciones del parto. Algo que se puede hacer para diferenciar unas de otras, será por ejemplo tumbarse si se ha estado activa, o realizar alguna actividad si se ha estado poco activa. En el caso de las contracciones Braxton Hicks haciendo esto se aliviarán las molestias, pero si se trata de las contracciones del parto, la mujer seguirá exactamente igual, por lo que puede ser señal de que ha llegado el momento.
¿Cuándo nos preocupamos al sentir contracciones?
- Tener contracciones fuertes y seguidas durante más de 4 horas.
- Si la mujer ya ha tenido partos prematuros.
- Un flujo vaginal fuera de lo normal.
- Dolor pélvico fuerte, o dolor inusual en la zona abdominal o de espalda durante el momento de la contracción.
Si se dieran cualquiera de estas causas, lo mejor será llamar al matrón o matrona y consultar cada caso para que aconseje a la embaraza qué hacer.
[…] malestares, también es una realidad que aparecen otros, como los problemas para dormir, o las contracciones Braxton Hicks, que aunque no son dolorosas, recuerdan a la madre en qué situación se encuentra. También en […]