El objetivo primordial de las Baby Shower es ayudar a los padres a conseguir todos aquellos artículos que el bebé va a necesitar, por lo que habitualmente, la madre hará una lista con todo aquello que aún no tiene. Un regalo de estos puede ser algo costoso para los invitados, y es por ello, por lo que una de las costumbres es hacer regalos por grupos.
¿Quién se encarga de los preparativos de esta fiesta? Pues por regla general suele ser la madre de la gestante, su hermana, una amiga muy íntima, o la propia mujer. La Baby Shower, normalmente se hará un mes antes de salir de cuentas, y la encargada de la organización deberá mandar las invitaciones al menos una semana antes del día elegido.
Por supuesto, no hay fiesta sin una buena decoración, y puesto que lo que se celebra es el nacimiento de un niño, nada mejor que crear un ambiente con toques infantiles. Los globos, las guirnaldas, o algunos detalles decorativos con motivos infantiles hechos por la anfitriona, serán algunas de las opciones a tener en cuenta.
Para terminar, otra cosa que no podrá faltar en la Baby Shower serán los juegos. Habrá que tener preparados de antemano algunos, como el de que los invitados intenten averiguar cuánto mide la barriga de la madre, o que con plastilina moldeen a un bebé.