¿Por qué llora el bebé? Esta suele ser una pregunta relativamente frecuente, especialmente, en padres y madres primerizos que sienten que todo es nuevo para ellos. Pero además, no saben interpretar el lenguaje propio del bebé en la rutina diaria. Está claro que el niño se expresa a través del lenguaje corporal, cuando está contento sonríe y cuando le sucede algo, llora. Aquí tienes diferentes razones por las que el niño puede que esté llorando:
1) Por una parte, a veces, el llanto es una forma de llamar la atención de los padres. Puede que quiere que le cojan en brazos.
2) En otras ocasiones, el llanto también es previo al momento de ir a dormir por la noche y apagar la luz. Para ello, es posible poner una lámpara en la mesilla de noche que ilumine la habitación levemente.
3) Por supuesto, el llanto intenso también puede indicar que el niño no se encuentra bien físicamente y está enfermo. Por ello, es importante ir al médico para poder saber qué le sucede y obtener un remedio en base al diagnóstico realizado.
4) En otros momentos, el niño también puede llorar porque tiene hambre. Por ejemplo, cuando el bebé se alimenta a través del biberón es más fácil controlar cuánto ha comido. Sin embargo, en caso de optar por la lactancia materna no es tan sencillo este control.
5) Otras veces, el niño puede llorar cuando no consigue aquello que quiere. De hecho, todos los padres se enfrentan en algún momento a las rabietas infantiles.
6) Conviene observar muy bien la intensidad del llanto. Y también, observar si el niño muestra algún dolor o molestia física al llorar.
Imagen: 3 Meses
