Nadie dijo que conciliar trabajo y familia fuera fácil, sin embargo, cuando una persona está contenta con el trabajo que tiene y además, tiene la suerte de haber formado una familia feliz, entonces, todo resulta mucho más sencillo.
¿Cómo puedes reducir el cansancio que surge de la difícil conciliación laboral? Aquí tienes algunos consejos prácticos:
1. Organiza bien tu tiempo. No resuelvas ningún tema del trabajo en casa, ni pienses en asuntos domésticos cuando estás en la oficina.
2. Contrata una canguro para que pueda cuidar de tu bebé. Resulta más eficaz que llevarle a la guardería y es que, el niño puede caer enfermo con mucha frecuencia. Por tanto, en el momento que enferma tienes que buscar a alguien para que cuide de él. Recurrir siempre a los abuelos puede ser un agobio para ellos. De hecho, mucho se ha hablado sobre la presión que sufre la generación de los abuelos canguro.
3. Aprende a delegar y especialmente, apuesta por la igualdad real. El machismo ya forma parte de la historia, sin embargo, en general, la mujer todavía sigue asumiendo más responsabilidades que el hombre en el seno del hogar. Por tanto, hombre y mujer tienen que dividir al cincuenta por ciento las tareas domésticas y el cuidado del bebé.
4. Haz un curso sobre yoga o sobre técnicas de relajación. Notarás un gran bienestar.
5. Busca tiempo y espacio para ti. Tu vida no se reduce únicamente a ser madre. De hecho, tienes que mantener el control de la situación para que las obligaciones no te desborden. De lo contrario, se produce el agotamiento físico y emocional. Disfruta del momento presente siempre con ilusión.
6. No pasa nada porque las cosas no sean perfectas. Es decir, da igual que la casa no esté perfectamente ordenada. Tu salud es más importante.
Imagen: Muy Pymes