Que los más pequeños de la casa pasen por la etapa conocida como “mamitis” es algo totalmente normal. A todos los niños les pasa más tarde o más temprano, la sensación de inseguridad provoca en ellos la necesidad de ser protegidos por la persona con la que más tiempo pasa y como suele ser habitual (aunque no sea así en todos los casos) que sea la madre, se habla de mamitis. Pero no necesariamente tiene que ser así, igualmente podríamos llamarlo “papitis”, si buscan el consuelo del padre, pero en este ocasión hablaremos de la “mamitis”.
¿A qué se debe la “mamitis”?, pues como decíamos se produce cuando los pequeños empiezan a tomar conciencia del mundo que les rodea, en él, a veces pueden sentirse inseguros y aún más, cuando sienten que van a separarse de los padres, por quedarse al cuidado de los abuelos, por ir a la guardería, o simplemente cuando alguien a quien no conocen demasiado, se acerca y les habla.
La forma de defenderse del niño ante estas situaciones, suele coincidir en todos, lloran, gritan, y montan una pataleta (como es lógico, unos niños lo llevarán mejor que otros y el grado del “drama” será menor o mayor en cada caso).
Por regla general, la mamitis aguda suele darse cuando el niño tiene alrededor de los dos años, un momento en el que, como decíamos, los peques ya empiezan a ser conscientes de lo que ocurre en su entorno.
No existe una fórmula mágica que solucione este problema, lo más importante es tener mucha paciencia durante esta etapa, que es transitoria en todos los niños. Sin embargo, sí se pueden evitar malos hábitos, como por ejemplo el hecho de dejarlo, pongamos que con los abuelos o con un cuidador, y salir a escondidas. Esto es un error, ya que, ciertamente no se dará cuenta de que la madre se va, pero en breve sí lo hará y su reacción será peor. Se recomienda que la madre siempre se despida del niño y le diga (aunque parezca que no entiende) que en breve volverá.
Foto obtenida de: babywell.com.
[…] tienden durante periodos, a preferir a uno de los dos padres, y es cuando se habla de “mamitis” o […]