La noche de Halloween ya está aquí, 31 de octubre. Es una cita perfecta para poder disfrutar de un momento agradable y divertido en familia. Por ello, un plan divertido es el de organizar una fiesta de disfraces en casa con familiares en donde el único requisito sea que todos se disfracen únicamente, haciendo uso de la ropa vieja que tienen por casa. Así también se potencia la imaginación y la creatividad en todos, además de cuidar el bolsillo.
Por supuesto, en la noche de Halloween también puedes comprar caramelos en el supermercado para que el niño los reparta por las casas en compañía de sus amigos. En ese caso, también se debe de poner la condición a los niños de que no recorran la ciudad sino que se queden únicamente, en la calle en la que viven. Para más seguridad, es mejor que los padres acompañen a los niños en ese momento.
Quienes no han comprado un disfraz pueden hacer compras tan sencillas como la de una peluca, una máscara o un antifaz porque con estos sencillos complementos, es posible tener un disfraz. Otra opción adecuada para celebrar Halloween es preparar una receta en casa con la temática propia de esta época del año. Es posible preparar unas sencillas galletas y decorarlas con algún toque de terror. Del mismo modo, también es posible personalizar una calabaza casera.
Por otra parte, los niños pueden escribir una redacción inspirados en Halloween. Se trata de una práctica educativa que les permite mejorar el lenguaje. Para finalizar, puedes decorar la casa con el espíritu de Halloween que es tendencia en España.
Imagen: Decoración y Casa
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