Con la crisis económica también se agudiza el ingenio a la hora de poder dar prioridad a algunos gastos respecto a otros. Pues bien, en Navarra, se han duplicado las bajas temporales de coches, precisamente, porque tener el coche en el garaje supone un ahorro importante de ITV, combustible, seguro e impuesto de circulación. Esta opción también se ha tomado no sólo en los casos de hogares en los que hay personas en desempleo sino también, en aquellas casas en las que existe más de un coche.
En la crisis, es importante aprender a suprimir gastos que son prescindibles aunque sea una forma temporal para poder dar prioridad a lo verdaderamente importante: gastos de alimentación familiar, pago de los recibos de la casa y también, gastos de colegio. La estabilidad económica se hace cada vez más difícil, pero los problemas económicos también se multiplican con una familia que sacar adelante y con niños pequeños.
En ese caso, la responsabilidad moral todavía es mayor. Los coches durante mucho tiempo fueron una especie de lujo insustituible puesto que existen conductores que cogen el automóvil incluso en los pueblos pequeños para ir a comprar el pan. Por ello, merece la pena hacer uso del sentido común y caminar para hacer deporte, ejercicio físico, llevar una vida sana y también, poder dar ejemplo de vida activa a los más pequeños de la casa.
Tristemente, con un 25 por ciento de paro las necesidades en muchos hogares que viven por debajo del umbral de la pobreza son más que preocupantes. Organizaciones como Cáritas, cuentan con la solidaridad ciudadana. Hace unos días, Amancio Ortega donó 20 millones de euros a esta entidad.
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