Hoy en día en los que, debido a la crisis, parece que todos se lo piensan dos veces antes de montar un negocio, y parece que lo que podría ser más rentable, es pensar en algo dirigido a los más peques de la casa.
Los negocios que se crean pensado en ellos, tienden, en muchos casos a funcionar. Por ejemplo, una peluquería, que muchos bebés odian, puede convertirse en el sitio al que querrán volver. ¿Cómo? Pues muy sencillo, con un poco de imaginación. Que las sillas sean llamativas y coloridas (vehículos, animales, etcétera), ya de entrada es un buen punto de partida. Si además de esto, delante tienen una pantalla con su serie favorita, o una consola, el niño quedará más que encantando. Por supuesto, el local también deberá tener un aspecto que llame la atención del niño, y que lo haga sentirse cómodo. En algunos de estos establecimientos, además, al final darán un diploma, en el que aparece su foto con el nuevo look, o un mechón de su pelo.
Más comunes, suelen ser los centros de ocio, en los que se ofrece un amplio espacio con parques de bolas, toboganes, etcétera, que además, suele ofrecer meriendas para que los niños puedan celebrar su cumpleaños.
Por supuesto, también los centros educativos, suelen ser una buena opción, especialmente cuando se ubican en barrios jóvenes donde hay muchos niños. Una academia de inglés, de baile o de cualquier deporte, o una guardería, podría funcionar a las mil maravillas.
Ni que decir tiene, que lo imprescindible a la hora de crear uno de estos negocios será contar con personal cualificado para trabajar con niños, y que tengan además, buen talante y paciencia para interactuar con ellos.
Imagen: U.S. Army