En nuestro entorno habitual, no es muy común desplazarse en bicicleta transportando a niños pequeños, si bien, es algo muy habitual en países como puede ser Holanda. En España, aun siendo poco común de momento, con más frecuencia se ve quien opta por llevar de este modo a sus pequeños. Sin duda una actividad de lo más saludable tanto para ellos como para nosotros.
Como además de agradable, queremos que sea una actividad segura, tenemos que seguir cierto tipo de normas. Existe un Comité de Seguridad y Prevención de lesiones infantiles perteneciente a la Asociación Española de Pediatría, el cual hace una serie de recomendaciones al respecto, como son el uso obligatorio de un casco debidamente ajustado. También añade la utilización de un asiento adicional que esté homologado. Según indica el Reglamento General de Circulación, el conductor de la bicicleta debe ser mayor de edad y el pasajero ser menor de siete años. Para un transporte seguro de los niños en la bicicleta, los mismos deberían ser mayores de un año (teniendo así la suficiente fuerza muscular).
Existen remolques para bicicletas (que parecen más seguros para transportar niños), si bien, éstos no están aún contemplados en nuestra normativa.
Con estas pautas lograremos que, además de disfrutar de una agradable actividad, ésta sea segura para los más pequeños.