La muerte forma parte de la vida, es una realidad palpable. Sin embargo, gracias al avance de la ciencia médica, la esperanza de vida en los países desarrollados ha crecido de forma notable. En cualquier caso, es fundamental mirar más allá de lo evidente para recordar que vivimos en un mundo lleno de desigualdades sociales como bien muestra el hecho de que 18.000 niños mueren cada día por causas que se pueden evitar. A todo ello también hay que sumar la muerte de 800 madres según datos aportados por Save the Children en el informe sobre el Estado Mundial de las Madres.
Este informe muestra que las mujeres y los niños son más vulnerables que los hombres en conflictos o desastres naturales. En concreto, ellas y los niños tienen 14 más posibilidades de morir que ellos en una situación así. Las mayores tragedias que afectan a las mujeres en situación de vulnerabilidad son la falta de asistencia médica en el parto, la explotación y la violencia sexual.
David del Campo que es el responsable de Programas Internacionales y Ayuda Humanitaria, envía un mensaje claro, directo y necesario: “Todos los niños y niñas tienen derecho a sobrevivir, independientemente de donde hayan nacido. Muchas de estas muertes son evitables con los planes y las inversiones adecuadas”.
El estudio ha tomado como objeto de análisis la situación vivida en 178 paises. Los factores analizados han sido el riesgo de mortalidad de las madres, el porcentaje de mortalidad infantil en niños de menos de cinco años, el PIB per cápita y la educación de los niños. Un dato que muestra cómo la felicidad de un niño está determinada, en parte por el lugar en el que nace. Algo, sin duda, injusto.
Fuente – El Mundo
Foto – Imágenes de Niños