Por tanto, no te agobies si al principio no extraes mucha cantidad, puedes hacerlo a ratitos, siempre que te venga bien, aunque se aconseja mantener aproximadamente el horario de las tomas del pequeño (lo que conlleva que tendrías que hacerlo en tu jornada laboral).
A primera hora de la mañana es cuando más leche se tiene, por lo que puedes aprovechar este momento para obtener más, pero ten en cuenta que la cantidad también depende de otros factores como el tiempo transcurrido entre toma y toma, el tipo de sacaleches o el estrés.
Si utilizas un sacaleches, al igual que cuando amamantas a tu bebé, es importante una buena colocación. La copa del extractor debe cubrir toda la areola. Si lo haces mal, puedes obtener menos leche y te puede doler el pecho. Además, antes de empezar las extracciones, estimula el pezón suavemente. Un masaje también será la mar de útil.
Imagen: guiainfantil