Conclusiones sobre el colecho II

Hay que considerar el colecho únicamente con los padres. No tendría sentido que el colecho se practicara con cuidadoras o familia extensa.
En caso de duda, considera la opción de pedir consejo profesional a un especialista, te dará un punto de vista objetivo que puede ayudar a valorar de forma objetiva tus circunstancias y tomar la decisión que más te convenga a ti y a tu familia.
A veces se toma la decisión de practicar el colecho bajo la premisa de pasar más tiempo con los pequeños para aprovechar las carencias del día. Efectivamente, cuando compartimos cama pasamos más tiempo con los bebés, pero esto no suple en ningún momento la necesidad de padres e hijos de pasar tiempo durante la vigilia. Por lo que el colecho no debe suponer una “sustitución” en ningún momento.
Si nos encontramos rodeados en una circunstancia en la que la opinión tanto a favor como en contra es radical, no se nos olvide que estos términos no suelen ser aceptados, ya que existe el equilibrado término medio adaptado a nuestra condición y creencias que nos debe dar la suficiente confianza para no dejarnos llevar por opiniones que no nos convengan o que nos hagan sentir culpables.
Recuerda que no hay soluciones universales que satisfagan la inmensa variabilidad de familias, pero sí ideas que adaptadas puedes ser la solución a sus dudas y preocupaciones.

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