La adopción es una de las opciones que tienen las parajes cuando algunos de los dos no puede tener hijos, o les resulta complicado. Antes de tomar esta importante decisión, el hombre y la mujer deberán haberlo hablado largo y tendido y estar muy seguros de que eso es lo que quieren. También deben saber que el proceso puede durar más tiempo del esperado, y que no en todos los casos se consigue el objetivo, por lo que han de estar preparados para todos los obstáculos que se encuentren en el camino, y armarse de paciencia para que todo ello no resulte angustioso sino que se viva cada día con la idea de que el objetivo bien lo merece.
Existen dos opciones a la hora de adoptar, la adopción nacional o la internacional. Por regla general la mayoría de las parejas optan por la internacional, el por qué es sencillo, el tiempo de duración del proceso es mucho menor, ya que mientras en España ese tiempo puede ser de alrededor de 9 años, en Hipanoamérica, por ejemplo, podría ser de entre 8 a 30 meses.
En el momento de comenzar los trámites, la pareja comprobará que necesita un certificado de idoneidad , sin esto no se podrá avanzar en el papeleo, que como su propio nombre ya deja entender, se trata de un estudio que se le realiza a los adoptantes para verificar que realmente son aptos para adoptar. Algunos de los puntos que se tendrán en cuenta para ello, serán:
– Que ambos tengan una estabilidad psicosocial y madurez emocional.
– Que mantengan una actitud y una motivación adecuada.
– Que la pareja sea estable y que ambos quieran adoptar.
Dependiendo en el país en el que se vaya a realizar la adopción, los adoptantes se encontrarán con diferentes requisitos. Por ejemplo, para hacerlo en China un requisito será no tener más hijos, cosa que en Bolivia no se exigirá.