Como lo están leyendo y lo han conseguido en China. Se trata de un avance transgénico que han realizado los investigadores de la Universidad de Agricultura, dirigidos por el profesor Ning Li, en un intento por buscar una alternativa a los productos lácteos en polvo y los sustitutivos de la leche materna.
Para ello han modificado genéticamente el ADN de un grupo de vacas lecheras del tipo frisona -las de manchas blancas y negras- y les han introducido genes humanos. El resultado ha sido espectacular y según los científicos en una década el nuevo producto estará listo para ser consumido por nuestros bebés.
Lo cierto es que la noticia ha disfrutado de una buena acogida porque esta sería una manera fácil y barata de producir leche con las mismas propiedades que la materna y además a escala industrial.
La iniciativa, que se ha investigado en el Laboratorio de Agrobiotecnología del Estado de Key, contó con el respaldo de la compañía GenProtein Biotechnology de Pekín quien se interesó en este proceso precisamente buscando un método que permitiera crear una leche rica en lisozima, la proteína que protege a los bebés de las infecciones bacterianas.
La lisozima se encuentra abundantemente en la leche materna y en la animal sólo encontramos trazas. Sin embargo, con la manipulación genética las vacas del estudio han conseguido producir leche con una versión recombinada de esta proteína.
Las diferencias entre ambos tipos de leche son prácticamente nulas y sus propiedades nutricionales e inmunológicas son prácticamente iguales a la de la leche que produce la mujer, incluso en los niveles de lactosa, proteínas, grasas, y el total de sólidos.
A pesar de ello, Baby Milk Action ha querido apostillar las declaraciones de Ning Li, afirmando que en ningún momento se trata de idéntica a la humana y que lo que han conseguido los científicos es encontrar la fórmula para producir tres componentes que en la actualidad falta en otras leches y modificar las cantidades de grasas y proteínas.
Pueden acceder al informe completo de los investigadores de la Universidad de Agricultura a través de la revista científica Plos One.
elena says
Jamas una leche fabricada sera similar a la leche materna, podra tener un ingrediente, no confundan con su informacion, se trata de vacas que les han modificado los genes anadiendoles genes humano, pero eso no significa que la leche sea igual a la que produce la mama para su hijo, el componente que se refiere es la lactoferrina y ahora otros dos mas segun lei la nota en otra pagina,
son vacas produciendo leche de vaca con componentes modificados, pero no es leche humana, son solo unos componente no puedes decir que las diferencias son nulas
No confundan dediquen tiempo a promocionar informacion objetiva.
Diego says
Tal y como se expresa en el artículo, nadie dice que la leche sea exactamente igual, en todo caso muy parecida, y con los compuestos más importantes idénticos, que en el fondo era lo importante. Se trata de facilitar el proceso para obtener leche con la que las madres que no pueden dar el pecho tengan la posibilidad de dar a sus bebés un producto lo más parecido posible (o incluso “mejor”, al poder ajustar al máximo los componentes).
Está claro que mejor que lo natural, es difícil de conseguir, pero esto es un buen avance, y algo esperanzador para mucha gente (cuanto más sencillo de fabricar, más barato y accesible).