Antes de aventurarse a adoptar una mascota, entre las cosas a tener muy en cuenta es el hecho de que muchos pequeños pueden tener alergias al pelo de los animales. Para comprobar si es así, bastará con que el niño esté en contacto con alguno, la opción más sencilla para esto es llevarlos a alguna casa en la que habiten animales… y si después de pasar la tarde allí no hay estornudos, ni ojos llorosos, ni picores, la familia tendrá el camino libre para dar el paso.
Los animales preferidos en principio por los niños son los perros y los gatos (por regla general los perros son los que mayor aceptación tienen). Los padres que no tienen tiempo podrán límites a esta decisión, ya que en ambos casos requieren muchos cuidados y pueden llegar a acarrear mayores problemas. Por ello, se optará por los animales que puedan mantenerse enjaulados, como pájaros, hámster, conejos enanos, o los peces, por poner algunos ejemplos. Hay que tener presente, que a no ser que los niños pidan expresamente cualquiera de estos ejemplos, si se opta por ellos cuando lo que desean es un perro o gato, lo más probable es que en principio se consuelen pero que a la larga vuelvan a abordar el tema de la mascota al no poder interactuar con éstos de la misma forma que lo harían con un perro o gato. De manera que antes de comprar un hámster, un pájaro, o peces, lo mejor será recalcarles que no podrán cogerlos, jugar con ellos, y sacarlos de las jaulas (aunque en ocasiones algunos de ellos se domestican y se acostumbran a ello, pero el resultado nunca será igual que con los perros o los gatos).
Resumiendo, antes de tomar la decisión de qué mascota elegir, habrá que pensárselo muy bien, y siempre tener presente los pros y sobre todo los contras de cada especie.