Las rupturas de pareja, siempre son un drama, por mucho que se idealice el final de una relación siempre muestra un fracaso personal, una apuesta que no salió bien. Sin embargo, en caso de tener un bebé, puedes considerar a tu hijo como el mejor premio del amor y la mayor motivación para salir adelante y seguir luchando. La desolación después de una ruptura de pareja es muy potente, por ello, tener la alegría que produce un niño es muy importante para estar bien.
Por otra parte, un hijo también es un nexo de unión eterno entre dos personas, por ello, es indispensable tomar esta situación como una obligación moral para tener cordura en una relación de pareja. Es decir, no tienes que ser amigo de tu ex, pero al menos, tienes que tener una comunicación cordial en lo referente al niño.
En una separación, lo más habitual es que cada familia se posiciones de una forma directa a favor o en contra de él o de ella. Este tipo de batallas emocionales, lejos de favorecer la situación, complica las cosas todavía más.
Piensa en positivo. Una de las ventajas de que el niño sea muy pequeño cuando se separan sus padres es que en realidad, no se entera de qué está pasando. Y esto es bueno a nivel emocional.
Imagen: Ánimo de Mujer