Muchos padres se preguntarán si deben o no poner pendientes a sus hijas. Esto no es algo que nadie pueda decidir por ellos, ya que mientras que algunos lo tienen muy claro, otros dudan de si marcar a su bebé por tener un determinado sexo.
Es un tema que siempre estará a debate, por un lado unos lo verán como una tortura el hecho de hacer esto, y por otro, otros estarán encantados con los resultados.
Los motivos que algunos darán para poner pendientes, pueden ser:
– La niña lucirá una joya y quedará más guapa aún.
– Los padres no tendrán que estar constantemente diciendo que su bebé es una niña, ya que se verá a primera vista.
– La niña pasará cuanto antes el mal trago y se evitarán los sofocones y los miedos en un futuro.
Los motivos que se pueden dar para no ponerlos, son por ejemplo:
– La niña es demasiado pequeña.
– Los padres se niegan a marcar a su bebé por el mero hecho de ser una niña.
– Los padres sienten preocupación por si el pendiente se les cae y se lo tragan, por si se le engancha en la ropita y les desgarra la oreja, etcétera.
– Otro motivo de preocupación es el hecho de que pueda llegar a infectarse el agujerito.
Como decíamos son los padres los que tendrán la última palabra, y esa decisión no deberá ser discutible. Lo que sí aconsejamos es que se haga lo que se haga, sea por convicción y no por la presión de la sociedad (es habitual oír como insiste una abuela para que le pongan los pendientes cuanto antes a su nieta, o que alguien de la calle diga aquello de “como no tiene pendientes parece un niño”). Por tanto, los padres no deben dejarse influir, y ser fuertes con la decisión que tomen.
Imagen: ryanrocketship.