El instinto protector de las mamás sale en todo su esplendor cuando llegan los primeros fríos. Pero no por poner a nuestro hijo como una cebolla va a coger menos catarros. Además, al abrigarle demasiado estará incómodo y sudará, y esto no le hace ningún bien. Lo mejor es ponerle distintas capas de ropa (un body, una camiseta, un jersey...). Con una sola prenda gruesa el niño pierde movilidad. Con varias, podemos ir poniéndole y quitándole en función de los cambios de temperatura. Tampoco hará … [Read more...]