Es frecuente que los padres comparen la forma y la edad en que sus hijos van adquiriendo ciertas habilidades con las de sus hermanos, primos, amiguitos, o cualquier otro niño de su entorno y hallen diferencias.
Si notas que existen ciertas notables diferencias en el desarrollo de tu hijo con respecto al de otros niños de su misma edad, lo primero que debes hacer es ponerte en contacto con su pediatra. El pediatra despejará las dudas y recomendará la solución más adecuada.
En casos de prematuros, de niños abandonados o de aquellos en los que se observa un retraso psicomotor patológico será muy valiosa la atención temprana.
La atención temprana son unos tratamientos e intervenciones que están dirigidos por un grupo multidisciplinar de especialistas en psicología, fisioterapia, etc., que consiguen, mediante la estimulación periódica y al ritmo de cada niño, su desarrollo psicomotor completo.
En estos casos es cuando la estimulación ha de ser guiada y tutelada por los especialistas; en los casos restantes, la estimulación ha de estar implícita en el día a día de cada niño: en los juegos, en la música, en el contacto con otras personas o con otros seres, en el lenguaje… Todo ello se convertirá en un instrumento para aprovechar esa plasticidad neuronal de los primeros años de la vida de un niño y lograr extraer todo el potencial del futuro adulto.
Imagen: funlava
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