Lo más probable es que a los 22 meses el bebé ya haya dado señales de cuál es su personalidad, y los padres ya podrán hacerse una idea de por dónde van a ir los tiros. Y es que en este momento, el bebé ya demuestra que él es un ser independiente, con su propia forma de ser y con sus también propios gustos.
A los 22 meses sabe lo que quiere, y es posible que incluso le guste elegir la ropa que va a ponerse para salir, o lo que le apetece para comer.
La curiosidad de los niños es enorme, y en muchas ocasiones llegan a “volver locos” a los padres. Y es que sobre esta edad, es habitual que comiencen a preguntar por todo, y por supuesto a comenzar las frases diciendo: “¿Por qué…? Es importante que los padres satisfagan su curiosidad y que, en la medida de lo posible, den respuesta a sus innumerables preguntas, de forma sincera.
Es posible que los padres alrededor de esta edad, decidan pasar al bebé de la cuna a la cama, y algunos bebés además de este cambio también se enfrentarán al de dormir en una habitación él solo. Esto puede provocar incomodidad en el niño, e incluso miedo, por lo que será probable que en más de una ocasión se levante a mitad de la noche e intente colarse en la cama de los padres. Para evitar los miedos, se puede utilizar alguna lamparita de noche, y dejarle elegir un compañero (peluche) que le reconforte y le haga sentirse seguro durante la noche.
