Hoy se festeja una fecha muy especial: el Día Internacional de la Familia. Una fecha muy igualitaria ya que cualquiera puede sentirse implicado: abuelos, hijos, tíos, primos y sobrinos pueden celebrar este día en primera persona sintiendo de cerca el valor de ese tesoro que es el hogar, la familia y los seres queridos. En la sociedad individualista, y especialmente, en las grandes ciudades, la necesidad de establecer un orden de prioridades para poder dedicar el tiempo necesario a la familia. De lo contrario, se produce la distancia y muchas veces, los seres queridos se convierten en verdaderos desconocidos. Por otra parte, cuidar de la familia es el mejor ejemplo que los padres pueden dar a sus hijos en la infancia, para que los peques crezcan en un entorno de protección emocional y de fortaleza.
En esencia, cualquier fecha es positiva para festejar el Día de la Familia. De hecho, existen momentos y hábitos que deberían ser una celebración en el día a día. Por ejemplo, el momento de la comida o de la cena. Debería de ser un espacio para la puesta en común de cómo ha ido el día. También, el momento de los juegos en el que cualquier padre puede pasar un rato con su hijo. O simplemente, ese instante en que le cuentas a tu niño un cuento de buenas noches.
¿Cómo se puede inculcar valores familiares a los niños?
1. En primer lugar, yendo a visitar a los abuelos todos los domingos.
3. Celebrando los cumpleaños con los seres queridos.
4. Poniendo fotografías de los familiares en el salón de casa. Cuidando la memoria de aquellos que ya se han ido.
Imagen: Encuentos