Hoy día, existen muchas facilidades a la hora de poder comprar productos preparados con los que alimentar a los niños. Este tipo de platos que ya vienen cocinados no son una buena opción para todos los días, sino que son la mejor oferta para ocasiones especiales en las que ha habido una urgencia en el hogar o no has tenido nada de tiempo para cocinar. Por ello, antes de comprar comida preparada para niños puedes tener en cuenta los siguientes datos:
1. En primer lugar, lee bien la etiqueta del producto para informarte sobre los ingredientes que contiene. En algunos casos, también se informa sobre la edad recomendada a la que está dirigida el producto.
2. Una vez que el producto ya esté abierto no debe de estar guardado en el frigorífico más de 48 horas.
3. Asegúrate bien de que el producto está envasado al vacío.
4. Es mejor comprar platos y de carne y verdura por separado. Después, puedes crear un menú combinado con ambos productos.
5. Evita calentar el producto en el microondas en el mismo tarro. Coloca la comida en un plato de cristal y después, realiza el mismo proceso.
6. Evita comprar productos que contienen los siguientes ingredientes: sal, azúcar, almidón modificado o glutamato monosódico añadido.
Las comidas preparadas son una buena solución que además, resulta de gran comodidad para los padres en días puntuales. Así el niño está bien alimentado y lo mejor de todo, es que no se necesita estar mucho tiempo en la cocina. Pero insistimos en que esta solución solo es recomendable para días muy puntuales.
Imagen y más información: Crece Bebé
