Tener un hijo no es un capricho, ni un juego. Se trata de una decisión muy seria que una persona tiene que tomar como tal. El grado de madurez es un factor decisivo a la hora de tener un bebé. Por esta razón, la maternidad temprana en la adolescencia no es positiva porque al final, la mamá se ve obligada por circunstancias externas a madurar antes de tiempo pero no sigue su ritmo interno.
¿Qué rasgos muestran madurez emocional para ser madre?
1. En primer lugar, la persona es estable a nivel profesional. Es una persona trabajadora capaz de cumplir con sus objetivos y de seguir con la meta que se ha marcado.
2. Una persona madura es aquella que es consecuente porque sus hechos son un reflejo directo de sus palabras. Es decir, sus promesas tienen un valor muy importante al estar fundadas en la verdad.
3. La tolerancia a la frustración también es de vital importancia para ser una buena madre ya que cualquier mujer tiene que renunciar a mucho tiempo para sí misma cuando tiene un niño. Existen situaciones muy cotidianas que pueden ser muy frustrantes. Por ejemplo, que el niño llore sin parar durante toda la noche con la impotencia de no saber qué le pasa exactamente.
4. Una persona madura es aquella que sabe lo que quiere en la mayoría de los ámbitos de su vida. No es alguien que delega sus responsabilidades en una persona externa porque tiene la inteligencia emocional suficiente para resolver conflictos, tomar decisiones y gestionar sus emociones.
Imagen: Ella Hoy