Como decíamos anteriormente, la edad habitual para dejar el pañal, será entre los 2 y los 3 años. No obstante, cada niño lleva su propio ritmo, y unos podrían hacerlo antes y otros después, aunque es recomendable que, lo hayan hecho, antes de comenzar a ir al colegio, ya que se exigirá en la mayoría de los casos.
¿Cómo saber si es el momento idóneo? Se deben dar dos factores importantes, por un lado el niño tiene que tener cierto grado de madurez, y por otro, se debe comprobar si es capaz de aguantar el pipí, durante varias horas.
Para comenzar el aprendizaje, habrá que coger unas rutinas y poner unos horarios. Para ello, los padres pondrán al niño, sentado en el orinal, a la misma hora, y siguiendo un mismo ritual. En principio, se puede hacer cuando el niño se levanta por la mañana, después de las comidas y antes de irse a dormir por la noche.
Algunos padres, verán oportuno optar por una opción radical, es decir, retirarle el pañal durante el día y la noche. Otros, preferirán que primero el bebé se acostumbre a hacerlo por el día, y le mantendrán el pañal durante la noche, hasta que superen la primera parte. Mientras que habrá otros, que le mantengan el pañal durante la primera etapa, poniéndolo en el orinal habitualmente (cada 2 horas aproximadamente). La fórmula, la deberán elegir los padres, buscando aquella que más les convenza.
Es importante que, durante este período de control de esfínteres, el niño utilice ropa cómoda, que se pueda bajar y subir sin problemas. Y otro punto destacable, es que no hay que reñir al niño si tiene escapes de pipí, y sí habrá que recompensarlo cada vez que consiga hacerlo en el orinal (demostrar entusiasmo, aplaudirle, decirle que ya es un niño mayor, etcétera).