La halitosis o el mala aliento, también es un problema infantil que afecta a alrededor de un 20% de los niños. No es algo por lo que haya que preocuparse, pero sí hay que investigar el motivo por el que esto sucede.
El mal aliento infantil, puede deberse a diferentes causas, la más frecuente va a ser una mala higiene bucal. La solución para ello, es tan simple como que los niños aprendan a cepillarse bien los dientes, haciendo hincapié también en la lengua. Que los padres se cepillen los dientes, a la vez que los hijos, es una buena medida para, por un lado, vigilar que lo hagan de la forma correcta, y por otro, para que los peques puedan aprender la rutina, y la manera de hacerlo.
A continuación, la halitosis también puede ser debida a alguna infección, como amigdalitis, faringitis, amígdalas, vegetaciones, etcétera.
Por último, en el caso de que el mal aliento, tan solo ocurra en momentos puntales del día (como recién levantados), esto puede ser debido a que el cepillado no fue bueno a la hora de acostarse, que ha dormido con la boca abierta (lo que provoca sequedad), o que lleve varias horas sin comer, entre otras. La solución en estos casos, será lavarse los dientes y lengua, beber agua, o comer algo.
En menos porcentaje, la halitosis puede deberse a los reflujos, que se trata cuando algo de que lo que contiene el estómago, regresa de nuevo a la boca.
Cualquiera de los casos mencionados, puede ser el motivo por el que los niños tengan mal aliento. En la próxima entrada, hablaremos de qué hacer en el caso de que el niño sufra cualquiera de ellos.