Si a su hijo recientemente el otorrinolaringólogo le ha recomendado hacerse una adenoidectomía, no pierda la calma, pues le explicaremos qué es y los cuidados necesarios, para que él, y usted, pasen por esto de la mejor manera y con la mayor tranquilidad.
Empezaremos explicando que las adenoides (vegetaciones) son masas de tejido situadas en la parte trasera de la cavidad nasal, las cuales están formadas por tejido linfático y forman parte del sistema inmunitario del cuerpo contra infecciones, por lo cual pueden aumentar de tamaño tras infecciones repetidas. Este aumento de tamaño, puede provocar dificultad en la respiración nasal, por lo que se aconseja extirparlas, mejorando la respiración, y ayudando además a que el pequeño tenga menos infecciones de oído y garganta.
Será un otorrinolaringólogo o un cirujano de cabeza y cuello quien lleve a cabo la intervención.
Como aspectos a tener en cuenta antes de la intervención quirúrgica de nuestro pequeño, debemos saber que el niño deberá de comer y beber varias horas antes de la cirugía (ésto le será indicado por el médico o el personal de enfermería), por lo cual debemos tener bien anotado la fecha y hora de la intervención, así como cuando debe dejar de comer y beber, entre otras cosas.
Para la cirugía, el médico le administrará al pequeño anestesia general, haciendo que se duerma durante la intervención y no sienta dolor alguno. Una vez dormido procederá a la extirpación de las adenoides, en un proceso que tardará alrededor de los 45 minutos.