Vamos con ello. Ya sabes que la globoflexia es el arte de “modelar” con globos y combinarlos para conseguir divertidas y llamativas figuritas. Todo en esta manualidad encandila a los más pequeños de la casa. Alucinan viendo cómo trabajas con los globos y les encanta el resultado.
En esta ocasión os traemos la técnica para realizar una de las figuras más facilitas y vistosas que existen y que nos pueden ayudar a decorar una estupenda fiesta temática (marinera, de piratas, a lo Bob Esponja…), un estupendo cumpleaños o simplemente a entretener a nuestros hijos en una fabulosa tarde juntos.
¡Ya verás qué caritas!
Materiales:
- 3 globos grandes, 2 de ellos blancos para fabricar los ojos.
- 6 globos alargados y moldeables de los que se usan en globoflexia.
- 1 rotulador negro.
Elaboración:
Lo primero y primordial es hinchar los globos. En este sentido y si te vas a hacer fan de esta técnica, que será lo más posible porque resulta muy adictiva, te interesará hacerte con un hinchador (casi siempre vienen de regalo en las bolsitas con globos moldeables), más que nada para no acabar con los mofletes de Louis Armstrong.
A ver, el orden es el siguiente. Hincha el globo grande (el que no es blanco) y hazle un nudo. A continuación vete a por los 6 de igual color e ínflalos, colocándolos alrededor del brazo, para que vayan tomando forma de espiral. Cuídate de dejarles un apéndice, para poder unirlos al globo grande. Únelos.
A continuación te toca hinchar los globos blancos. Con el rotulador encárgate de pintarles unas enormes pupilas negras. Cuando hayas acabado sólo tendrás que unirlos al resto del conjunto.
Carlos says
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