Anteriormente hablábamos de los síntomas y secuelas que puede dejar la bacteria del neumococo. Por ello, y debido a las complicaciones que conllevan cualquiera de las enfermedades derivadas del contagio del neumococo, muchos son los que optan por vacunar a sus hijos. La vacuna contra el neumococo existe, pero no se encuentra dentro del calendario de vacunación general (aunque parece que en algunas comunidades autónomas se va introduciendo en él), por lo que habrá que comprarla en la farmacia (cuesta alrededor de los 70 euros cada dosis).y llevarla después al centro de salud para que la pongan el responsable.
Existen en el mercado dos tipos de vacunas diferentes contra el neumococo: la vacuna de polisacáridos capsulares, y la vacuna conjugada heptavalente (Prevenar). Esta última presenta como resultado una menor eficacia contra la Otitis Media, pese a que cubre un mayor número de tipos distintos de Neumococo, por tanto habrá que sopesar cuál compensa más, y dejarse asesorar por el pediatra del niño para ello.
El número de dosis que se administrará, dependerá de la edad que tenga el niño. Las dosis en que se pondrán en el caso de bebés menores de 1 año, son tres, a los 2, a los 4, y a los 6 meses de vida.
Las complicaciones que se llegan a acarrear por el neumococo pueden evitarse con la vacuna, por tanto es altamente recomendable que los niños se las pongan, por lo que habrá que estar muy pendientes cuando llegue el momento.
Recordemos una vez más que la meningitis (una de las enfermedades producidas por la bacteria del neumococo) es la primera causa de muerte infantil en niños menores de cinco años en países desarrollados, de manera que es algo que no habrá que tomarse a la ligera, y la vacuna será algo que no habrá que dejar pasar por alto.