Como ya hemos comentado estos días, lo habitual en el caso de los niños pretérmino es que pasen sus primeros días de vida en el área de Neonatología. Allí serán las enfermeras especializadas quienes se encarguen, principalmente, de los cuidados del bebé.
En este sentido, sería bueno que estuvierais presentes, siempre que fuera posible, para aprender los cuidados que, después en casa, tendréis que procurarle vosotros. Por ejemplo, en la UCI de Neonatología las enfermeras suelen realizar cambios posturales cada vez que manipulan a los niños, esto es, aproximadamente, cada tres o cuatro horas.
Para todos los bebés, el contacto piel con piel con la madre (también denominado Método Madre Canguro) es fundamental para su desarrollo, pero aún es más importante cuando hablamos de niños prematuros.
Si vuestro bebé es prematuro, es normal que sintáis inseguridad e incluso miedo cuando llegue el día de llevarlo a casa. Hasta ese momento, ha sido un equipo médico quien se ha hecho responsable de los cuidados de vuestro hijo pero, una vez que esté estable, os tocará a vosotros continuar esa labor.
Entre las recomendaciones que suelen hacerse a los padres se encuentran:
- Tener una buena higiene siempre que se esté en contacto con el niño, para evitar la transmisión de enfermedades.
- Colocarlo boca arriba con la cabeza hacia un lado (por si hubiera regurgitaciones) y no abrigarlo en exceso.
- Emplear jabones suaves para el baño.
- Salir a pasear, pero evitando las horas de mucho calor o abrigar al bebé adecuadamente, si es que hace frío.
- Pautas, cantidades y horarios que deben seguir si es que fuera necesario administrar algún tipo de medicación al recién nacido.
Imagen: cheekychums