Cuando nutritivamente la leche materna ya no es suficiente, debemos incluir en la dieta del bebé nuevos alimentos. Es una etapa emocionante tanto para el pequeño como para su mamá, que tiene la tarea de proporcionarle poco a poco las mejores opciones, variadas y sanas. Para ello, los purés infantiles son la opción perfecta. Descubre las claves de la preparación casera y cómo te pueden ayudar los tarritos comerciales en ocasiones especiales.
Los purés que le des a tu hijo tienen que ser variados y deben ir incorporando poco a poco todos los grupos de alimentos. Se comenzará por los de frutas y verduras y para obtener buenos resultados hay que cuidar la elección de los ingredientes y su preparación.
En el caso de las verduras, para conservar la mayor parte de los nutrientes posibles, como son las vitaminas, preferiblemente se han de cocinar al vapor: cuanto menos agua uses, mejor. El recipiento donde hagas la cocción tiene que estar tapado (una olla a presión es una buena opción) y es recomendable utilizar el líquido de la cocción para los purés (o para sopas), aprovechando así todas las sustancias.
En cuanto a las frutas, procura escoger las de temporada y que estén en su justo punto de maduración.
Además, hay que tener mucho cuidado con su introducción en la dieta del niño; se debe hacer una a una, para comprobar su tolerancia.
No todas las veces será posible que le prepares a tu hijo el puré en casa y, por eso, en ocasiones tendrás que recurrir a los tarritos comerciales. Estos, gracias a que son fáciles de transportar y conservar, nos permiten tener la comida del bebé lista en cualquier lugar y en pocos minutos, aportando al pequeño los nutrientes que necesita.
En el mercado existen innumerables variedades: de verduras, de frutas, de carne, de pescado, de cereales, con trocitos… Evidentemente ofrecen sabores diferentes a los de los purés caseros, pero esto también favorece que el pequeño se acostumbre a nuevos sabores y texturas. Además, no contienen gluten y son bajos en sodio y grasas.
En sus etiquetas encontrarás toda la información nutricional que necesites conocer, la recomendación de uso por edades, y las indicaciones para su correcta preparación y conservación.
Imagen: tendig
