Actividades extraescolares III

Los alumnos, a través de la música y su práctica, armonizarán todas las facultades humanas: físicas, intelectuales, sensitivas, creativas e intuitivas, contribuyendo a su educación integral. La música constituye una de las mejores vías para conseguir un desarrollo armónico de la personalidad infantil, pues facilita los medios para descubrir el mundo e interiorizar sus experiencias expresándolas en otro tipo de lenguaje.

Los objetivos que se plantean en esta actividad son los siguientes:

• Vivenciar el mundo sonoro.
• Desarrollar la capacidad de atención y concentración para adquirir una mayor sensibilidad auditiva.
• Improvisar esquemas rítmicos, melodías sencillas, acompañamiento con instrumentos, actividades de danza.
• Reconocer timbres, matices e instrumentos.
• Manejar con soltura distintos instrumentos de percusión.
• Adquirir una expresión corporal creativa.

La educación del oído, la educación de la voz, el ritmo, la instrumentación y la creación de una orquesta son aspectos básicos para tener en cuenta en la formación de talleres musicales.

La mayoría de los métodos que se han desarrollado a lo largo de la historia de la educación musical (Orff, Suzuki…) se basan en tres elementos: el ritmo, la melodía y la armonía.

Artes marciales

 El judo, el karate, el aikido… ayudarán a los alumnos a potenciar el respeto de su propio cuerpo, del de los demás y de sus recursos (flexibilidad, coordinación, agilidad, equilibrio).

Cada una de estas prácticas requiere sus rituales y una puesta escénica determinada. El equilibrio psíquico, el espíritu de superación y el autocontrol son pilares base de estas artes.

El baile

Sea ballet clásico o baile moderno, esta actividad introduce a los alumnos en el mundo de la música y del ritmo, mejorando la forma física.

Incluye todo tipo de danzas.

Imagen: abc

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