Leer es bueno para los niños sea cual sea la hora del día, pero el hecho de hacerlo justo antes de ir a dormir resultará una excelente opción para que ellos se relajen y rompan, por decirlo de alguna manera, con la actividad diaria. Crear un ambiente acogedor, sin ruidos, con la luces bajas, y con lo reconfortante que les resulta escuchar a su padres y compartir ese final del día con ellos, serán factores que les hagan vivir el momento de ir a dormir como algo agradable, e incluso, serán muchos los que estén deseando irse a la cama.
Que leer es un buen hábito es algo que todos estamos acostumbrados a escuchar, pero ¿por qué se le da tanta importancia? La respuesta es muy sencilla: los cuentos primero y los libros para niños mayores después, les enseñarán valores, como a distinguir lo que está bien de lo que está mal, y por otro lado aprenderán a leer, a fijarse en la ortografía, a hablar correctamente, y algo muy importante… un libro siempre les dejará echar a volar su imaginación, y con ellos se consigue que desde temprana edad sean capaces de dar soluciones a los protagonistas de los libros, de manera que también aprenden a pensar por sí solos y enfrentarse a los problemas diarios.
Se dice que la literatura es la base fundamental de la cultura en la sociedad, por tanto no es algo a descuidar. Es tarea de los padres, y también de los educadores, enseñar al niño a leer y crear unos hábitos que les inviten a ello. Y esto no es algo que suponga un esfuerzo, si se acostumbra al niño a leer desde muy pequeñito, irá creciendo considerando la lectura como algo importante y divertido en su vida, como ocurre con el juego… de hecho un libro es un “juguete” que le trasportará a todo un mundo de fantasía, con el que se podrá convertir en pirata, princesa, astronauta, o cualquier otro increíble personaje.
[…] tenido entre sus manos, o habrán al menos escuchado hablar de Gerónimo Stilton, una saga de libros que son capaces de enganchar a los más pequeños con sus apasionantes […]