El principal objetivo, y lo que más le interesará al bebé de doce meses, será andar y poder explorarlo todo a su antojo. Es por ello que a partir del año, el bebé podría dar la gran sorpresa a los padres y dar sus primeros pasos sin ayuda. No obstante, por regla general, los bebés tardarán un poco más, aunque esto dependerá de cada niño y no supondrá que el que lo haga meses después tenga ningún tipo de problema.
Al año, su actividad física, en ocasiones, terminará por ser agotadora para los padres y cuidadores. Y es que, el bebé estará lleno de energía y de ganas por jugar y aprender. Es por ello, que a esta edad, dormir no sea su actividad favorita, y como consecuencia de ello, será más difícil convencerlo de que ha llegado la hora de hacerlo. Las rutinas, que se deben haber estado practicando desde los primeros días, ayudarán a que esta “rebelión” sea cuestión de tiempo, y terminará por saber cuándo parar en sus juegos.
En esta etapa los bebés también pasarán por una etapa de desconfianza hacia los extraños y querrán tener siempre a sus padres controlados. Las ausencias lo inquietarán especialmente y no será tarea sencilla dejarlo al cuidado de otros.
Respecto al lenguaje, ellos entenderán prácticamente todo aquello que se les dice, y tendrán sus propio idioma para comunicarse (que en la mayoría de los casos tan solo entenderán aquellos que están más próximos a él), y utilizará correctamente un número de palabras limitadas.
Es un buen momento para comenzar a educar al niño, partiendo de cosas sencillas, como puede ser recoger los juguetes. Por supuesto, habrá que ofrecerle facilidades para ello, por ejemplo teniendo un arcón, caja grande, baúl, etcétera, donde el niño pueda ir echando los juguetes sin esfuerzo.
[…] momento de aprender a andar se vive de una forma diferente en cada niño. Sin embargo, alrededor de los doce meses, cuando el niño ya tiene un año, se siente más seguro para dar sus primeros pasos. Por supuesto, […]