El síndrome de Rett se trata de un problema neurológico degenerativo que se da en los bebes de sexo femenino. Su causa ha sido identificada como una mutación del gen MECP2 que se encuentra en el cromosoma X.
A primera vista, cuando el bebé nace, el síndrome de Rett no se hace evidente, y no es hasta alrededor de los dos años del niño (y antes de los 4) cuando da la cara. Por tanto, durante la primera etapa del bebé, su desarrollo parecerá totalmente normal. Su evolución será como la de cualquier otro niño, hasta que llega un momento, entre los 6 meses y los 4 años, en los que paran o hay una regresión en todo lo que han aprendido hasta entonces. Sus síntomas más evidentes son: un retraso a la hora de aprender a hablar, problemas motrices, movimientos de manos repetitivos y constantes (como si se estuvieran lavando las manos) así como un retraso mental considerado como grave.
Actualmente no existe tratamiento para los bebés con síndrome de Rett, y obviamente este dependerá de cada niña y del grado de la enfermedad en cada caso.
Parece ser que la enfermedad evoluciona poco a poco mientras la niña crece, y que una vez que llega a la adolescencia, se aprecia una mejoría y remiten en cierta manera los síntomas.
Los padres que deban enfrentarse, tanto a este síndrome, como a cualquier otro, podrán encontrar ayuda en los diferentes grupos de apoyo, que resultarán muy útiles para compartir con otros padres, con hijos con el mismo problema, sus vivencias e inquietudes.
FOTO obtenida de: www.rettsyndrome.org.es