Para su pleno desarrollo intelectual, un bebé necesitará la ayuda de sus padres, y éstos podrán aportársela de diferentes formas. Aquí os dejamos algunos puntos a tener en cuenta a la hora de cubrir las necesidades intelectuales de los bebés:
– Los padres deben facilitar a sus hijos el contacto directo con todo lo que los rodea, esto le proporcionará estímulos sensoriales, ya sean colores, texturas, música, escuchar una conversación entre adultos, el sentir que alguien le acaricia o le coge, el ruido de niños jugando… todo, hasta el más mínimo detalle será captado por el pequeño, que como se suele decir “absorben toda la información como esponjas”, aunque parezca que están en otra cosa.
– Desde temprana edad hay que dejarle que agarre cosas, comenzando el dedo de los padres, y continuando con objetos poco pesados, fáciles de agarrar y manipular. Cuando tengan control de esos objetos, habrá que pasar a utilizar otros más grandes.
– El tema de alimentación y el sueño se aplicarán prácticamente a todos los ámbitos, y es que, llevar una rutina de horarios para ambas cosas será algo realmente beneficioso para los bebés.
– Cuando comienzan a realizar acciones concretas, los padres lo deben estimular para que siga haciéndolo, ya que esta será la mejor forma de consolidar y mejorar cada uno de los conocimientos que va adquiriendo.
– El lenguaje es parte primordial de su aprendizaje. Primeramente comenzarán con el gorgojeo, después podrán decir sílabas, a continuación palabras, y terminarán siendo capaces de formar frases (cada niño lo hará a su propio ritmo). Hay que estimularlo a que hable, para conseguirlo los padres pueden probar a repetir los sonidos que hace su bebé, también hacer repeticiones de sílabas sencillas primero y palabras después, y por supuesto, hablarme siempre mucho aunque parezca que no entienda lo que se le dice.
Foto obtenida de: theta-dna-healing.net.
[…] el desarrollo intelectual, como el físico y el afectivoestán estrechamente relacionados entre sí, y es lo que va a ayudar […]