Cuidar la alimentación infantil es una fuente de bienestar para los más pequeños de la casa. Incluir en la despensa alimentos sanos es un buen medio para reforzar su crecimiento. ¿Qué elementos no deben de faltar en la cesta de la compra?
1. La fruta es muy necesaria para los niños, además, refuerza su hidratación. Existen frutas de temporada que son muy refrescantes, por ejemplo, el melón y la sandía.
2. El melocotón es una fruta perfecta porque tiene un toque dulce que gusta de forma especial a los niños. Una fruta ideal para tomar en esos momentos en los que el niño tiene el deseo de tomar alguna golosina, por ejemplo. Hay que lavar y pelar muy bien el melocotón antes de dárselo al niño.
3. El tomate se convierte en el complemento perfecto de cualquier ensalada pero también es un plato que puede prepararse y disfrutarse solo con otros complementos, por ejemplo, atún y huevo duro.
4. El verano es una buena época para dedicar más tiempo a la cocina y preparar recetas creativas. En ese caso, puedes preparar batidos y helados caseros que son mucho más sanos. Además, puedes animar al niño para que colabore en su preparación porque es saludable que los niños aprendan a cocinar. Cuida además la presentación de la receta para darle un toque más atractivo.
5. Durante el verano los niños tienen más tiempo de ocio y también aumentan las tentaciones de tomar snacks y golosinas. En ese caso, es muy importante ser firme para no romper las normas habituales del resto del año. Por ejemplo, el niño puede tomar con moderación este tipo de productos el domingo.
6. Aprovecha las verduras de la estación porque son las más sabrosas.
Fuente – Bekia Padres
