En vacaciones los desplazamientos familiares en coche son muy habituales, pero no debemos olvidar que el vehículo debe ser un lugar seguro para que nuestros hijos viajen sin peligro durante todo el año y, para ello, es imprescindible adaptar el coche a los más pequeños y cumplir con las normativas de tráfico y seguridad vial.
Evidentemente de nada sirve que tengamos nuestro coche adaptado hasta el más mínimo detalle si luego no somos capaces, como padres y como ciudadanos, de realizar una conducción responsable. Así que una vez que nos queda claro lo de respetar las normas y disfrutar de un viaje feliz en familia, vamos a ver cuáles son los aspectos más representativos de un automóvil seguro para los más chiquitines de nuestro hogar.
El habitáculo del coche debe ser cómodo y seguro para todos los miembros de la familia, pero los más pequeños deben además estar equipados con su propio sistema de retención. Puesto que los asientos y cinturones de seguridad están concebidos para personas con mayor estatura y ya entrados en una edad más adulta, para los niños es imprescindible su silla de seguridad.
Es muy importante que nos quede claro que, además, no sirve cualquier silla. Cada dispositivo debe cumplir con un estándar adaptado a la edad, estatura y peso del niño que la va a ocupar y no cabe escatimar, porque es tal vez el dispositivo de seguridad más importante para garantizar el bienestar de nuestros hijos dentro del coche.
Elegir una silla idónea para los pequeños no es difícil. Primero debéis saber que estos objetos cumplen la normativa de seguridad vigente. Para ello debéis fijaros en que la sillita para el coche lleve en la parte trasera el etiquetado con toda la información precisa. Deberá aparecer el fabricante, el número de serie y el sello de homologación.
Ahora la cuestión está en cómo saber cuál es el dispositivo de retención adecuado para nuestro hijo. Es muy fácil. Las sillitas para turismos se clasifican por grupos y van desde el 0 al 3 (0, 0+, 1, 2 y 3). Cada uno de estos grupos pretende adaptarse a un intervalo de peso infantil. No obstante, algunas sillas permiten la combinación de varios grupos de seguridad y así, conforme el pequeño va creciendo, puedes adaptar el modelo a su peso y estatura, simplemente añadiendo o eliminando piezas del dispositivo.
No olvidéis además que llevar a los menores en el vehículo sin el sistema de retención adecuado puede conllevar una sanción económica de hasta 200€ de multa, además de perder 3 puntos en tu carnet de conducir. Ello es porque está infracción está tipificada como grave. El dispositivo de retención para niños es obligatorio para todos los infantes con una estatura por debajo de 1,35 metros. No obstante, se aconseja que los papás sigamos usando una silla de seguridad hasta que el menor alcance una estatura de 1,50 metros.
Por cierto, no olvidéis que a partir de octubre de 2015, la normativa vigente cambia en cuanto al transporte de niños en el asiento delantero del vehículo. Ya no podrán ser transportados en esta parte del habitáculo ni siquiera con sillita y colocándola en sentido contrario a la circulación. Todos los menores por debajo de 135 centímetros de estatura, deberán viajar en su silla correspondiente y en los asientos traseros del vehículo.
Ahora que ya tenemos a nuestro hijo cómodamente sentado y además convenientemente protegido con el sistema de retención adecuado, podemos centrarnos en otros aspectos del vehículo, para que los traslados resulten lo más amenos posibles para los más pequeños. En este sentido, contar con dispositivos de entretenimiento como DVD’s o Tablets, colocadas en la trasera de los reposacabezas de los asientos delanteros, permitirá que los pequeños disfruten de sus dibujitos, sus pelis o sus vídeos favoritos.
Con estas pequeñas recomendaciones, ya verás cómo el viaje se hace más ameno, divertido y, sobre todo, con todas las garantías de seguridad para que disfrutemos de los traslados en familia.
Fotos | Blondinrikard Fröberg; Rusty Clark – Back In One Piece