La inteligencia emocional es un conocimiento muy importante, un aprendizaje que se ha ignorado en los colegios durante mucho tiempo. A los alumnos no solo se les debe enseñar matemáticas, literatura o historia sino que también, se les tiene que enseñar a ser felices, a expresar tus sentimientos y emociones de una forma asertiva, en definitiva, a conocerse a sí mismos. De hecho, este conocimiento es mucho más necesario para la vida diaria porque supone adquirir las herramientas necesarias para tener relaciones personales sólidas.
Afortunadamente, la inteligencia emocional se va a empezar a impartir en algunos colegios de España. Los centros de educación pública de Canaraias van a impartir “Educación Emocional y para la Creatividad” (EMOCREA) con el objetivo de integrar la educación emocional que potencia el desarrollo personal del alumno. La educación emocional pretende desterrar mitos del tipo “de esto no se habla” o “los hombres no lloran”. Ideas irracionales que han generado estereotipos equivocados en relación con la diferencia de género.
Pero la educación en inteligencia emocional debe comenzar en el seno del hogar, es decir, son los padres quienes tienen la responsabilidad de educar la afectividad de los niños con frases positivas, dosis de cariño, escucha activa y respeto porque por encima de lo que un niño vaya a ser de mayor desde el punto de vista de la profesión, lo que de verdad importa es que un niño sea feliz en su vida, tenga una autoestima sólida y construya una imagen positiva de sí mismo.
Este aprendizaje es el que reporta la inteligencia emocional que impartida por profesionales expertos puede ser de gran ayuda para que los niños descubran nuevas puertas en su vida.
Fuente – El Ciudadano
